🎅 Querido Papá Noel: Este año fui la mejor trabajadora remota, no me podés fallar 🎄
La previa de Nochebuena siempre me encuentra reflexionando, pero este año decidí hacerlo diferente: Papá Noel, te escribo a vos.
Tabla de contenido
Porque si hay alguien que puede entender lo que significa trabajar remoto, ser tu propio jefe y exportar servicios al mundo, sos vos, el rey del trabajo global. Así que acá estoy, con mate en mano y pijama navideño, repasando mi año.
Querido Papá Noel:
Este año me porté muy bien. No sé si entré en la categoría de "niña buena", pero como trabajadora remota creo que la rompí. Te cuento:
- Laburé sin horarios fijos, pero con metas claras. Entregué proyectos a tiempo aunque el cliente viviera en una zona horaria distinta. Mis "buenos días" fueron sus "buenas noches". Todo por la magia de internet.
- Me volvió experta en Google Meet. Logré reuniones perfectas con fondo prolijo y auriculares gamer. (Si eso no es profesionalismo, no sé qué es).
- Aprendí a surfear la ola del dólar. Porque vivir en Argentina y cobrar en moneda extranjera es casi un superpoder. Aprendí a optimizar cada centavo como si estuviera jugando al Tetris financiero.
- Logré equilibrar trabajo y descanso. Admito que la tentación de quedarme trabajando hasta tarde fue grande, pero también aprendí a desconectar, a disfrutar de una buena serie y recargar energías para el día siguiente.
- Ayudé a otros trabajadores remotos. Compartí tips, escribí guías, y recomendé herramientas útiles. Porque ser independiente no significa estar sola.
- Me hice mi propio árbolito laboral. Decoré mi espacio con props de oficina: una plantita, una luz para videollamadas y un escritorio que finalmente no es la mesa de la cocina.
La Navidad para los trabajadores remotos
¡Ay, Papá Noel! Vos mejor que nadie sabés que para los que trabajamos con empresas del exterior, la Navidad no siempre es igual. A veces la festejamos después de responder el último slack del equipo en Estados Unidos o de enviar un informe antes de las vacaciones. Otras veces miramos las luces del arbolito mientras chequeamos si todo quedó en orden para cerrar el año. Pero, entre matecitos y buenos deseos de los compañeros, sabemos que somos parte de algo grande: construir una vida llena de metas claras y oportunidades sin fronteras.
PD: Y por último, querido Papá Noel, me gustaría empezar a cobrar mis honorarios con Bitwage para poder diversificar y potenciar mis ingresos.
¡Gracias por escuchar, Santa querido! Espero tu respuesta... o tu regalo en forma de soluciones fintech. 😉